por Lidia Ferrari
Europa está convulsionada ahora por las elecciones parlamentarias de la Unión Europea. No recuerdo tanto interés en elecciones previas. Se sabía que Berlusconi enviaba a sus amigas como parlamentarias europeas. Una especie de premio. No trabajan y cobran muchos Euros. ¿Por qué tanto interés en esta elección, entonces? Porque hay un profundo malestar en esta Europa en crisis, sobre todo, desde que pasó de ser una Comunidad a ser un grupo de países deudores y acreedores. Los acreedores están sometiendo a los países más débiles a reglas de austeridad que profundizan la crisis.
¿Suena conocido el tema de pagar o no la deuda pública, renegociar o privatizar la deuda pública, el riesgo de entrar en default? Eso está viviendo Italia y toda Europa. Hay malestar con la presión de la Troika por el pago de la deuda y su política de austeridad (la Troika es la unión entre la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el FMI). Varios países, sobre todo los de la zona sur están en situación de crisis interna a raíz del crecimiento de la desocupación y el aumento de la pobreza. En este contexto de malestar, en algunos países se ha desarrollado una Eurofobia, y en muchos casos movimientos xenófobos y de derecha. Hay varios que plantean salir de Europa y salir del Euro. ¿Qué pasa en Italia?
Esta semana vino Beppe Grillo, el líder del M5S a la ciudad donde vivo. Grillo y los líderes que han nacido de este movimiento visitan cada plaza de Italia y hablan con los ciudadanos. No lo hace ningún otro partido o político. En primer lugar porque no iría nadie, y en segundo lugar, porque si fueran les tirarían tomates. Cuando llegué a Italia había un adormecimiento político que me impresionaba, viniendo del cambio radical de Argentina impulsado por los Kirchner. Los jóvenes y la gente en general parecían entre resignados y conformistas. Mientras en España estaban los indignados, en Italia no pasaba nada. No podía entender, con todo lo que sucedía, incluidos Berlusconi y sus escándalos, cómo la gente era tan indiferente. Es probable que creyeran que el estado de bienestar era eterno. Fueron despertando y mucho tuvo que ver el M5S y Beppe Grillo que comenzaron a denunciar la situación en la que se encontraban.
Grillo plantea que la Unión Europea debe retornar a ser una Comunidad, y no una Unión bancaria y financiera en función de una moneda que representa sólo a ciertas economías fuertes y no representa ciertas economías débiles como Italia, España, Grecia, Irlanda. La inflación antes de entrar a la Unión Europea era igual que ahora, dice: “¿De qué sirve tener baja la inflación del 2% si los salarios bajaron de 10 y 15%?”
El M5S es la única oposición real que hay a las políticas de estos últimos gobiernos en Italia. En este último tiempo han surgido muchas denuncias por corrupción y muchos políticos están terminando entre rejas porque la olla que se está destapando huele muy mal. En la coalición que gobierna (izquierda y derecha, supuestamente) hay cantidad de involucrados en la connivencia entre mafia y políticos. Sería interesante contar los detalles porque son desopilantes. Me recuerdan a los ….gate de la época menemista.
El M5S quiere llegar al Parlamento europeo para plantear que la deuda de Italia y de los otros países de sur es inmoral. Denuncian a los que firmaron los tratados que comprometen a Italia a ahorrar 50 mil millones anuales por veinte años. Dice Grillo algo que no se lo escuché decir a ningún otro político: “La Grecia quebró cuando representaba sólo el 2% del PIL de la Unión Europea. Si era una Comunidad la salvaban. Con nada la podían salvar. No queremos tener el fin de Grecia. Hay que ir y decir: hagamos una Comunidad. Es una mentira la crisis de Italia. Nuestro balance económico de entrada y salida está en saldo activo. Gastamos menos de lo que entra. Después debemos pagar 80 o 90 mil millones de Euros de Interés sobre la deuda para pagar la plata que nos han prestado los bancos franceses y alemanes. No se sale más de esta situación”.
Rechazan esta política de austeridad que sólo hará despedir a la gente de sus empleos públicos y acabar con las pensiones. Quieren ir al Parlamento para renegociar estos tratados. Si no se acepta la renegociación, hacer un referéndum consultivo para pensar la idea de salir del Euro. El M5S reivindica hacer como hicieron otras naciones con la deuda, y cita expresamente a Ecuador, Argentina e Islandia. Y proponen unirse con los países del sur que sufren los mismos problemas.
Cuando cierta izquierda los acusa de ser de derecha dicen: “Nos tendrían que agradecer. Sin nosotros estaría pasando como en Francia y otros países en los cuales el descontento ha hecho crecer a la derecha y la extrema derecha”. Lo cierto es que sus planteos coinciden con los de Tsipras, el líder griego de izquierda que está luchando para llegar a la Presidencia de la Unión Europea.
La síntesis del periodista Febbro es precisa, con respecto a lo que estuvo pasando en las últimas elecciones en Europa: “cada partido cuyo programa se ve asociado a las políticas neoliberales o a los programas de austeridad teledirigidos desde Berlín o Bruselas paga el tributo en las urnas”[1]. Veremos qué sucede el próximo 25 de mayo.
[1] Febbro, Eduardo. Nota: “Crisis y rebelión antes del voto en Europa”. Página 12, del 11/05/2014