Anoche mientras iba por el jardín místico
las flores heridas colgaban sobre las parras
al pasar por aquella fuente de cristal frío
alguien me golpeó desde atrás.
No estoy hablando, sólo camino
por este mundo agobiado de dolor
mi corazón ardiente aún anhela
algo que nadie en la tierra sabrá.
Dicen que el rezo es una ayuda poderosa
así que reza desde tu madre
en el corazón humano puede ocultarse un espíritu malvado
estoy tratando de amar a mi prójimo y hacer el bien a los otros
pero oh, madre, las cosas no van bien.
No estoy hablando, sólo camino
voy a quemar ese puente antes de que lo puedas cruzar
mi corazón ardiente aún anhela
no te tendrán piedad una vez que hayas perdido.
Ahora estoy abatido por el llanto
mis ojos están llenos de lágrimas, mis labios secos
si alguna vez encuentro a mis enemigos dormidos
los masacro donde se hallen tendidos.
No estoy hablando, sólo camino
por un mundo misterioso y difuso
mi corazón ardiente aún anhela
caminando por las ciudades de la plaga.
El mundo entero está lleno de especulación
ese mundo que la gente dice que es redondo
va a apartar tu mente de la contemplación
se aprovecharán de tu desgracia cuando toques fondo.
No estoy hablando, sólo camino
comiendo grasa de ojo de cerdo en la ciudad con ojos de cerdo
mi corazón ardiente aún anhela
algún día te alegrarás de tenerme cerca.
Te aplastarán con su riqueza y su poder
cada vez que te levantes te podrás quebrar
haré lo más que pueda en mi última hora extra
vengaré la muerte de mi padre y luego me volveré.
No estoy hablando, sólo camino
pásame mi bastón
mi corazón ardiente aún anhela
tengo que sacarte de mi pobre cerebro.
Todos mis compañeros leales y bien amados
me aprueban y comparten mi código
practico una fe abandonada hace tiempo
no tengo altares en este camino largo y solitario.
No estoy hablando, sólo camino
mi mula está enferma, mi caballo ciego
mi corazón ardiente aún anhela
pensando en aquella compañera que dejé atrás.
Hay brillo en los cielos y las ruedas vuelan
la fama y el honor parecen que nunca se apagan
el fuego se extingue pero la luz nunca muere
¿quién dice que no puedo recibir ayuda divina?
No estoy hablando, sólo camino
cargando la armadura de un hombre muerto
mi corazón ardiente aún anhela
caminando con mi talón dolorido.
La pena es infinita
cada hueco y cada hendija tiene sus propias lágrimas
no actúo, no estoy simulando
no estoy alimentando ningún miedo superfluo.
No estoy hablando, sólo camino
caminando desde aquella noche
mi corazón ardiente aún anhela
caminando hasta perderme de vista.
Mientras iba por el jardín místico
un día caliente de verano, un prado caliente de verano
permiso, señora, le ruego me disculpe
aquí no hay nadie, el jardinero se fue.
No estoy hablando, sólo camino
carretera arriba, doblando la curva
mi corazón ardiente aún anhela
en el último páramo, en el fin del mundo.
[Siempre me pregunté por qué Alexander Kluge usa esta canción para musicalizar la secuencia de la tumba oculta de Karl Marx en Das Kapital- Noticias de la antigüedad ideológica]