Ahora se está viendo qué significa un gobierno de derecha dura en Argentina. Te comportaste durante 16 meses como si no fuera cierto.
Te cansaste de la política y creíste que ahora venía una administración gris con la que podías convivir.
Ya sin la intensidad k, querías volver a tu especialidad, a la buena cocina, al jazz, a la ironía, rumbo a Cannes.
Te compraste la estrategia que la derecha te ensartó: volver a la normalidad (que nunca existió) partiendo de tu (no asumida) prosperidad k.
Basta de movilización dijiste, basta de Plaza de Mayo y militancia. Volvamos a ser normales (nunca lo fuiste).
La Argentina iba hacia el centro. Era el turno de los moderados. Un eslogan de campaña PRO que vos también compraste.
"Te vamos a dejar todo lo que tenés", aunque te duela pasar por zonzo te lo creíste.
Nunca pasaste hambre ni fuiste perseguido, creíste que macri te iba a dejar pancho, con tus festivalitos y tus jornadas.
No todo es política. Volvamos a pensar en nuestras carreras, basta de épica. Somos talentosos, queremos estar.
Tanta lucha ya cansa.
Creíste que tu siglo xxi, una vez disipado el humo de la Plaza, se iba a parecer a un atardecer en la terraza del Recoleta. Catering, confort y música para volar.
Ir al estreno de Hernán, fumar buen porro, hacer chistes. El siglo xxi.
Vos tan vivo y te cagó Fantino.
No sos malo, sos gris. No querés represión, querés el tránsito descongestionado. No querés una policía asesina, preferís pobres resignados.
Te llevará un tiempo todavía la brutal pedagogía de la historia. Te volverás viejo y te olvidarás de todo. Irás aceptando lo inaceptable. Odiarás al que puede sacarte el lugar, lo vas a empujar y le vas a pisar los dedos.
Salame.