"Es el resultado de la línea que se baja desde la crema y la-nata del Poder" dice Juan Grabois a propósito de la brutal represión de ayer en Luján
Del facebook de Juan Grabois:
Hace unas horas, en Luján, un montón de chicos festebajan el día del amigo en la Plaza Colón. Un grupito estaba rapeando y se armó una discusión. Rápido llegó la pacificación. Una banda desaforada irrumpió a las patadas y palazos. El saldo: cuatro niños detenidos. Dos siguen adentro de una comisaría. La peor parte se la llevó una niña de 12 años, hija de Clara, vecina del Barrio Villa del Parque, una urbanización que construyó una cooperativa del Movimiento de Trabajadores Excluidos. Nuestro compañero Agustín Burgos estaba con su hijita en el médico cuando recibió el pedidos de auxilio de varios vecinos. Llegó junto a otros adultos a reclamar por los chicos. Le reventaron el hombro de un palazo. Ahora está en el hospital.
La banda desaforada que cometió este atropello no era de barrabravas, ni piqueteros, ni "yonkis"... eran de una de esas fuerzas feudales de la que disponen ciertos intendentes, ese engendro llamado "policía local" que no es más que un nombre alternativo para la vieja y conocida Policía Bonaerense. Además de manejar la falopa y la trata, cada día se cargan a un pibe y dejan en decenas más la marca del apremio ilegal, las patadas, el verdugueo y la represión. Ahora están más zarpados que nunca. Les han dado carta blanca. Cada vez que pegan, los protegen, los televisan, los aplauden.
Esto no es un montaje. Acá está el crudo. Este es el resultado de la línea que se baja desde la crema y la-nata del Poder. Este es el fruto de la propaganda y la difamación. Quieren que los azules tengan los ojos rojos de odio y que no les tiemble el pulso ni ante el más chiquito de los nuestros. Quieren que vos veas en cada pibe y cada piba pobre un asesino serial en mimiatura frente al que es mejor pegar primero y preguntar después. Esta es la sociedad infanticida que quieren crear para que los hijos de unos pocos duerman tranquilos con loza radiante, en altas torres o en barrios cerrados, mientras la mayoría no tienen ni luz, ni cloacas, ni pan. Una régimen de segragación dónde a la prole del descarte le queden dos opciones: permanecer recluido en los basurales sociales o recibir un balazo en la nuca.
Están desaforados. Trabajan en la impunidad. Atropellan los más sagrados derechos de los más sagrados entre los humanos: los niños. Tal vez sea precipitado decirle a estos despreciables Fascistas del Siglo XXI que no pasarán. Tal vez no tengamos fuerza. Pero mientras nos quede un sólo suspiro les vamos a dar pelea.
Echa un vistazo al Tweet de @JuanGrabois: https://twitter.com/JuanGrabois/status/888225357069004800?s=09