Respecto de la precandidatura de Guillermo Moreno a diputado en CABA por el Frente Unidad Porteña, leo algo que ha escrito Lorenzo Donohoe a lo que en términos generales adhiero:
"Independientemente de los fallos que puedan citarse, el vandalismo de Moreno en el Indec fue uno de los mayores errores de los doce años y uno de los que mayor daño nos causó, semejante necedad, combinada con la prepotencia peronista que ya Perón había declarado superada no solo hizo las delicias de los personeros de la demonizacion K, irritaba a los laburantes cuando veían que se negaba lo obvio (nadie pensara que la patronal era leninista cuando acordaba aumentos de sueldos más de diez puntos arriba del IPC moreno), tanta idiotez permitió que un tarado como Pino dijera que mentíamos hasta en el pronóstico sino que legitimó la distorsión de Todesca de los índices pobreza, costo de vida, etc. a favor de las empresas, el cinismo científico que sin pudor llevo adelante el Pro distorsionando la estructuración de los índices y dificultando empalmar series históricas.
"Esa prepotencia que debió utilizarse en el 45 para llevar adelante la épica de inclusión más grande de nuestra historia, es hoy una copia berreta y desteñida que solo sirve parta descalificarnos, también su proverbial soberbia le permitió creer que su desarrollo profesional en una ferretería lo habilitaba para descalificar a Kicillof, profesor de macroeconomía por concurso en la UBA, un muy raro caso de un ministro de economía con una destacada personalidad académica, no vinculado al sector empresario, financiero o a los organismos internacionales de crédito, doctorado con una tesis sobre Keynes que mereció un 10. Valga recordar que exclusivamente por el despropósito Moreno se discute el crecimiento del PBI 2015 y el déficit fiscal 2015, dos logros de la gestión del ministro Kicillof".
Hasta aquí Donohoe. Agrega Oscar Cuervo.
Intuyo que entre el peronismo paladar violeta Moreno goza la simpatía de un Titán en en Ring que les garantizaría una supuesta dosis de pureza doctrinaria o peronchismo sobreactuado, necesario para conjurar sus temores a la "socialdemocracia" o los "progres" entre los que los violetas temen quedar desdibujados, aunque no se le animan a cuestionarle eso a la propia Cristina porque tiene los votos.
El asunto es que Moreno no tiene los votos, sino que por el contrario los pianta. Su presencia en una lista en 2017 sería tan eficaz (para el enemigo) como una lista conformada por los muy leales compañeros Boudou, Anìbal, Luis D'Elía y Esteche. Es decir, ideal para pelear el séptimo puesto con el partido de San Filippo. Es la imagen del peronismo soñado -entiéndase bien, no temido sino SOÑADO- por Clarín. Moreno no tiene chances de ganar la interna, pero sí de entrar por minoría, dado que están estos peronchistas violáceos que quieren transformar su participación en las PASO en una performance estética y no en un intento de sacar más votos. Con Moreno en la lista, los canales del régimen temdrán sus candidatos por Unidad Porteña preferidos para sus luchas en el barro, para que haga sus monerías, grite, se muestre cómicamente iracundo y tilde a Kicillof de marxista. Es probable que así logren meter a Lousteau en segundo lugar, Moreno quede afuera de diputados y además impida que otro compañero kircherista entre. Esa será su misión, no temida sino agradecida por el macrismo. Tendremos gracias a los peruquistas morados un diputado menos y un estereotipo fácilmente ridiculizarle para ellos. Y un montón de pelotudos que creerán que poner la boleta de Moreno es preservar el gen originario del peronismo cuarentista en cuarentena. Yo los veo más como los giles que ponían una feta de salame cuando en 2003 podían elegir a Néstor.
Es que aún no se entendió el valor contradictorio del peronismo en la historia argentina y su imposibilidad de conciliarse en una identidad consistente. No abrigo esperanzas de evitar ese escenario, ya que la termocefalia no es un atributo exclusivo de los cacerolos sino de la época de la posverdad, o del nihilismo si prefieren. Hay una termocefalia peronchista y ahí está la base eleccionaria que ponga a Moreno en un lugar en la lista que no lo hará llegar a ser elegido en octubre y regocijará los shows de Magneto y Fantino.