Ya ocurrió, ¿cómo lo olvidan? (Alejandro Kaufman)
Un programa para bajar clickeando acá
Testimonios de dos participantes del cacerolazo:
Un programa para bajar clickeando acá
Testimonios de dos participantes del cacerolazo:
El límite a la igualdad es el piso de la concordancia.
¿Hasta dónde llega la igualdad? Se nos acaba de decir: hasta donde me afecte en lo más mínimo.
Cuando la "clase media" dice algo así, dice "nada", porque mide su logro sobre la falta del otro. No hay arreglo posible.
Son como el enano azul del Submarino amarillo. No hay arreglo posible, ni representación, ni negociación siquiera. Solo la ley.
No hay absurdo mayor que la atribución de legitimidad a lo que es inseparable del odio y el crimen.
Es como si dijéramos del violador: su demanda de goce es legítima y atendible si la separamos de la violación.
Error fatal: "No hay sectores sociales que quieran de verdad volver atrás con eso". No tendría ningún sentido el "nunca más".
El "nunca más" es necesario porque existe -es plausible, objeto de deseo- el propósito de volver atrás con todo.
La idea de que hay logros irreversibles: no sé si es mera ingenuidad o autoconsuelo tranquilizador. Lo peor es darle publicidad.
Para la historia el optimismo es una forma de ceguera.
Lo contrario del optimismo no es el pesimismo, sino el consentimiento hacia la verdad.
En el laboratorio argentino, algunas reacciones frente a lo del jueves permiten entender porqué han ganado casi siempre los malos.
Donde ven una aglomeración más o menos grande, enseguida tienen que echar agua bendita.
Caen bajo la seducción del número.
La condescendencia con lo del jueves arroja por la borda cualquier compromiso serio con DDHH.
Cuando el kirchnerismo reacciona en forma antagonista con lo del jueves TIENE TODA LA RAZÓN.
Y es por eso que produce malestar, porque "enfrenta".
En cuanto a que hay mil medidas discutibles que podrían haber sido mejor planteadas: seguro. Pero NADA justifica lo del jueves.
Esto es lo que hace posible el fascismo: la debilidad de la mayoría para oponerse a su propia gravitación en tanto mayoría.
Estuvo muy clara la demanda del jueves. No den de comer a los pobres con nuestro dinero.
¿Qué parte de esa demanda no se entiende?
El fascismo de la llamada clase media no nace en el congreso ni en los medios, sino en dormitorios, confesionarios, ascensores.
Procede del orden libidinal sobre el que se sostiene el régimen capitalista. Muestras las limitaciones de la institucionalidad democrática.
Mientras no cambie la sociedad lo único que se puede hacer con los del jueves es aplicarles la ley y trabajar para mantener la mayoría.
No "contra", sino defensa de los ddhh. No "aplicación", sino vigencia institucional. No "debates", sino normatividad vigente.
Nunca antes hubo oportunidad semejante de tener que discutir cómo actuar democrática y políticamente contra el fascismo.
Confunden descripción con prescripción. Describir lo del jueves como gesto de insolidaridad radical no indica cómo comportarnos al respecto.
Hacer justicia descriptiva a lo del jueves implica escuchar lo que decían, no pasarlo por alto para sobreinterpretarlo.
La cuestión no es solo haber estado allí, sino haber visto después dónde se estuvo y qué se dijo allí.
En el momento del jueves puede no haberse advertido todo lo que se decía, pero sí después. En el momento se pudo pasar por alto. Después no
Lo mínimo que se puede esperar que se diga es "Estuve en una marcha nazi. No fue lo que pretendía. Lo repudio."
Es penoso y desgraciado que progresistas pretendan convencernos de que el goce del violador es legítimo en sí mismo, aparte de la violación.
O que los violadores deben considerarse dignos de inclusión en el conjunto.
¿Cómo creen que se llega al crimen colectivo si no es de esta manera? YA ocurrió, ¿cómo lo olvidan?
En esas cegueras desafortunadas se explica la historia reciente más que en ninguna otra cosa.
Me preocupan mucho más esas voces condescendientes y enceguecidas que la propia marcha, en sí misma un evento parcial.
Que el Premio Nobel de la Paz valore positivamente (en Radio Mitre) lo del jueves es catastrófico.
Es propio de momentos de crisis que las divisorias de aguas eleven y hundan trayectorias, prestigios, años de labor.
Para bajar el audio completo del programa, clickear acá.