Hace 6 días Horacio Verbitsky informó en El Cohete a la Luna sobre una denuncia judicial presentada por el empresario Pedro Etchebest acusando a Marcelo D'Alessio de haberlo extorsionado en nombre del fiscal Carlos Extornelli. Según Etchebest, D' Alessio, que no es funcionario judicial sino que se presenta como agente de los servicios secretos norteamericanos, le exigió el pago de 500.000 dólares para no detenerlo en la causa de los cuadernos fotocopiados que Extornelli lleva adelante con el juez Bonadío. La noticia provocó estupor en las filas del oficialismo, que manipula la causa en contra de los políticos opositores y especialmente contra Cristina Kirchner, a quien se acusó de ser la jefa de una asociación ilícita para recaudar coimas por la asignación de contratos en las obras públicas.
Durante meses el sistema de propaganda del régimen dio por probado el delito, aunque Bonadío y Extornelli, pese a sus denodados esfuerzos, no obtuvieron una sola prueba empírica contra Cristina. Por declaraciones de los abogados defensores de las decenas de acusados y "arrepentidos" se sabía desde hace rato que Bonadío y Extornelli incurrieron en prácticas extorsivas, amenazas y torturas psicologías para tratar de obtener alguna "confesión" que incriminara a Cristina. Pero estos dichos no habían sido respaldados hasta ahora por pruebas concretas. La nota de Verbitsky incluye una cantidad de pruebas em´´iricas de las extorsiones que D'Alessio dirigió a Etchebest en nombre de Extornelli: abundantes audios, videos, fotografías y capturas de pantalla de chats mostraban la intensa presión a la que Etchebest fue sometido por D'alessio, quien siempre solicitó el dinero como una exigencia del fiscal Extornelli.
La gravedad de la denuncia conduciría en un sistema judicial razonable a la nulidad de la causa de las fotocopias de cuadernos, por los procedimientos irregulares en que Bonadío y Extornelli incurrieron para dictar procesamientos y prisiones preventivas. Si el poder judicial argentino se atuviera a las garantías jurídicas, los únicos procesados deberían ser el par de inquisidores que llevaron adelante la causa y tendría que declararse la falta de mérito de todos los procesados y detenidos. Esto aún no sucedió: a pesar de que los procedimientos ilegales de los funcionarios judiciales tomaron estado público, ellos siguen disponiendo detenciones y procesamientos. Extornelli, muy tardíamente, varios días después de producida la denuncia por extorsión, salió a denunciar a D'Alessio, quien siempre sostuvo, incluso una vez difundida la noticia, que colaboraba con él. Nadie ha explicado para quién trabaja D'Alessio ni cómo es que tenía acceso a un expediente secreto.
D'Alessio, el acusado directo, había sido en los últimos años un columnista frecuente de Clarín e Infobae, e invitado habitual del programa Animales Sueltos del América TV, donde se lo presentaba como uno de los máximos expertos en la lucha contra el narcotráfico.
Al difundirse la noticia, la primera reacción del sistema mediático del régimen fue tratar de ocultarla. En las primeras horas, D'Alessio salió a defenderse mediante excusas inconsistentes. El propio Extornelli dijo que prefería no hablar del tema pero negó una relación con D'Alessio, a pesar de que en distintos reportajes admitió haberlo visto 2, 3 o 4 veces (a medida que los días avanzaban, Extornelli parece haber recordado más reuniones con D'Alessio). Extornelli no pudo negar el encuentro que tuvo en Pinamar con D'Alessio y el intendente massista de Salta, Gustavo Sáenz, el 8 de enero pasado, ya que fue fotografiado por el hijo de Etchbebest.
La fotos forman parte de la abundante prueba que presentó Etchebest en el juzgado federal de Dolores, donde radicó la denuncia. La abogada que representa a Etchebest dice que los audios, fotografías y videos que hasta ahora trascendieron periodísticamente son una parte menor de toas las pruebas que ya presentaron en Dolores. También presentó un video en el que se ve a Etchebest dándole billetes a D'Alessio:
Los intentos del sistema de propaganda oficial por ocultar la noticia fueron fracasando a medida que se propagaba por las redes sociales. Lentos de reflejos, los columnistas de Clarín, Infobae y La Nación, quizás presas del estupor por la denuncia inesperada, elaboraron un relato precario en el que pretenden hacer pasar a D'Alessio como funcionario K, a pesar de que durante meses ellos mismos lo acreditaron como gran experto antinarco y publicaron numerosas columnas firmadas por él. El caso del Grupo América es más oscuro. Como D'Alessio fue invitado al programa Animales Sueltos y presentado como una voz autorizada, América optó por seguir esquivando la noticia. Pero siempre hay una grieta por la que la luz entra.
Ayer al mediodía Leandro Santoro fue invitado a un programa de América 24 a hablar, una vez más, de la "corrupción K". Pero en el aire a Santoro se le ocurrió sacar imprevistamente el caso de las Extorsiones de Extornelli, descolocando a periodistas y panelistas del canal que habitualmente difunde las operaciones de los servicios macristas, norteamericanos e israelíes.
Dice Leandro Santoro:
Estuvimos debatiendo en A24 sobre "corrupción". Pensábamos que el tema central iba a ser la denuncia contra el fiscal Stornelli.
Pero... 🤔
Es extraordinario observar la cara de pánico de los periodistas y panelistas de América 24, al ver cómo la noticia tan temida se les filtraba en una emisión en vivo para un público que recibe cada día dosis tóxicas de mentira.
